Diversión en la luna y en la vía láctea
Tan ocurrente como el nombre de Vialattea es el de Monts de la Lune o Monti della Luna, el pequeño territorio de Montgenèbre y Claviere. Monti della Luna dispone de 100 kilómetros de pistas situadas entre los 1.350 y los 2.680 metros de altura y repartidos entre 60 pistas.
Y esto es solo el principio, pues el resto de la vía láctea ofrece un total de 250 pistas. Por encima de la Colle Bercia, en la región del Monti della Luna, los deportistas de invierno llegan hasta Cesana a través de una pista azul o por la exigente pista negra Croce, la cruz.
Desde Cesana una telecabina lleva en dirección a Sansicario y Sauze d’Oulx. Mientras Sauze d’Oulx dispone sobre todo de descensos de dificultad media a través de frondosos bosques, en el territorio de pistas Sansicario los esquiadores encontrarán preciosas cuestas rojas y una larga y complicada pista, que pertenecía al circuito olímpico.
La última área de Vialattea es la de Sestriere, la zona más conocida de esta estación de esquí XXL. Desde el Monte Fraiteve, por encima de Sansicario, varias pistas fáciles y de dificultad media llevan hasta el antiguo estadio olímpico a una altura de 2035 metros. Desde aquí se puede conquistar el Monte Motta con sus numerosas pistas rojas y una pista olímpica, así como el Monte Sises que también tiene dos pistas olímpicas.
El camino de vuelta a los montes de la luna lleva alrededor de Montgenèvre. Con una telecabina para ocho personas se llega desde la estación de Sestriere hasta el Monte Fraiteve en la zona de Sansicario. Sobre los esquíes se llega hasta Pariol, la estación central de la telecabina. Esta une Cesana con Sansicario. El último trozo hasta la estación del pie de la montaña se tiene que hacer en la telecabina desde Cesana hasta la Colle Bercia.
Descensos que llevan en parte por inclinaciones boscosas fáciles y de dificultad media, van hasta Claviere. Después de solo un viaje en el telesilla los deportistas de invierno tienen a su disposición las cuestas alrededor de Montgenèvre. En la zona de Prarial hay pistas fáciles de prácticas así como varias bajadas rojas. Desde las generosas pistas situadas más abajo de Col de Gondrans se llega hasta las pistas de más nivel de Rocher de l’Aigle.
Muy querida es la zona que une Italia con Francia por los freerider, ya que en todos los sectores hay miles de posibilidades para bajar fuera de los caminos marcados y disfrutar de la nieve vírgen. El más exigente, puede dejarse llevar por un helicóptero hasta alturas insospechadas, para descender por la nieve más vírgen de todas las pistas.
Una gran oferta de snowparks
Con tanta variedad de pistas también los snowboarder y los freerider tendrán algo entre lo que escoger. El territorio de esquí gigante está provisto de un total de cinco snowparks, un recorrido boardercross y una halfpipe. El snowpark de Sestriere a pie de pistas mide 250 metros de largo y tiene dos telearrastres propios. También el snowpark de Sansicario que está al lado de la estación ofrece tres líneas distintas de slopestyle, mientras que en el “Double Black Park” de Sauze d’Oulx hay una quarterpipe, rails y kickers.
Dos snowparks más los hay en Monti della Luna. Al lado de la zona freestyle en Claviere, en la zona de Montgenèbre, hay un Funpark así como un boardercross y una halfpipe.
Quien prefiera conquistar la vía láctea sobre los esquís de fondo, puede escoger entre los 50 kilómetros de pista destinados para este propósito. La mayoría de los tramos están al lado de Pragelato, donde también se disputaron las competiciones olímpicas de la disciplina nórdica. Desde Sestriere y Claviere se llega por una pista de esquí de fondo hasta Montgenèvre.