Oferta ilimitada de pistas
La zona preferida de los principiantes está, sobre todo, en la parte francesa, en las amplias pistas de la estación La Rosière, mientras que los profesionales del esquí se sienten más en casa en suelo italiano en dirección a la zona de Le Belvédère (2.641 m), así como en las pistas negras de Les Suches. Aquí, además de descensos de hasta un 78% de pendiente, se encuentra la pista más larga de toda la zona de esquí, la „7 San Bernardo“, de 11 kilómetros y toda una aventura. La red de pistas de estos dos países está perfectamente conectada mediante 38 remontes, de los cuales hay dos telesillas también abiertas para peatones y senderistas. De esta forma, los visitantes de esta zona de San Bernardo tienen también la posibilidad de disfrutar sin esquís o tabla de snowboard de los extraordinarios parajes que ofrece esta zona de esquí internacional que, incluso, en algunas partes ofrece unas increíbles vistas al Mont Blanc. Por otra parte, los más aventureros que buscan auténticos retos saben apreciar las numerosas ofertas en rutas de heliesquí en las que los amantes de la nieve en polvo se lo pasan en grande.
El parque de snowboard de Roc Noir, situado justamente encima de La Rosière, un sector de snowcross de unos 2 km de largo y una halfpipe completan asimismo la oferta de San Bernardo especialmente destinada a snowboarders. Y, los amantes del esquí de fondo, por su parte, pueden disfrutar a conciencia de los 30 kilómetros de pistas trazadas que pone a su disposición esta zona de esquí franco-italiana.
San Bernardo también es un destino atractivo para las familias gracias a su amplia oferta de actividades para los más pequeños. Así, la estación La Rosière cuenta con una zona infantil de prácticas, una guardería, una guardería de esquí y una escuela infantil de esquí, para las que los menores de 8 años ni siquiera necesitan forfait.
Vacaciones de esquí en un entorno acogedor
Los visitantes de La Rosière pueden disfrutar de unas vacaciones de esquí entrañables alojándose en alguno de los muchos chalets de madera acogedores que abundan esta estación o disfrutando de la gran oferta après ski de esta localidad con sus numerosos restaurantes y cafés, un teatro, un cine y una discoteca. Y para disfrutar de actividades al aire libre más allá de las pistas nada mejor que dar un paseo tirado por perros, ir en moto de nieve o tirarse en neumáticos por la nieve, dar un paseo con raquetas de nieve, o bien volar hacer de una maravillosa ruta en helicóptero hasta el Mont Blanc.