Paraíso del esquí para principiantes y profesionales
Como en todos los Tres Valles, los que se deciden a pasar sus vacaciones de invierno en Courchevel se encuentran también en la zona de esquí conjunta más grande del mundo, la de Les Trois Vallées, donde, gracias a sus casi 180 remontes se puede acceder fácilmente y casi desde la misma puerta de la casa a los 600 kilómetros de pistas de los Tres Valles y emprender largas rutas partiendo desde el mismo Courchevel, si bien Courchevel tiene suficientes pistas para disfrutar de una variada semana de esquí, ya que entre sus 92 descensos ofrece siempre una pista para cualquier nivel, sobre todo para los principiantes, que tienen a su disposición numerosas pistas muy cercanas a las tres estaciones que, como discurren principalmente por bosques, resultan fáciles de descender, incluso en malas condiciones de visibilidad, pero también para los esquiadores más profesionales, que disfrutarán a lo grande de las pistas de mayor altitud situadas en las vertientes del Roc Merlet o del Saulire, con sus descensos empinados Grand Couloir y Couloir de l’antenne.
Además, aparte de la gran oferta en pistas fáciles que ofrecen a los principiantes las mejores condiciones para disfrutar a lo grande del esquí, Courchevel pone también a disposición de los principiantes suficientes profesores de esquí y, de hecho, Courchevel posee el récord de las escuelas de esquí más grandes de Europa con los más de 500 profesores de esquí de los que dispone en temporada alta.
Los que prefieran disfrutar del increíble paisaje alpino de Courchevel, puede hacerlo también con los esquís de fondo entre sus distintas pistas de esquí de fondo repartidas a lo largo de un total de 66,5 kilómetros, entre las que también se encuentra una pista de mayor dificultad de 17 kilómetros de largo, así como una pista de 2,5 kilómetros ubicada a 2.300 metros de altitud.
Los niños también tienen la diversión garantizada en Courchevel 1850, ya que este distrito dispone de una zona de esquí infantil, una guardería infantil, una guardería de esquí para los más pequeños y una escuela de esquí infantil.
Après-Ski, acogedor y chic a la vez
La oferta de ocio y actividades après-ski se presenta tan variada como el público de los tres distritos de Courchevel y, de hecho, conforme se va subiendo de altitud, se va incrementando también la variedad y la exclusividad de la oferta gastronómica y turística. Así pues, Courchevel 1850, además de numerosos restaurantes gourmet y exclusivos bares y discotecas que permanecen abiertos hasta a primeras horas de la mañana, tiene también dos galerías comerciales con boutiques distinguidas, así como distintos centros deportivos y gimnasios. Más abajo, Courchevel 1650 y Courchevel 1550, si bien menos chic, ofrecen también suficientes locales de ocio que harán las delicias de todos sus visitantes después de la jornada de esquí.
Y, los que también quieran practicar deporte más allá de las pistas, en Courchevel pueden escoger entre numerosas actividades como, por ejemplo, hacer senderismo o hacer marcha nórdica sobre un total de 14 caminos para ello perfectamente acondicionados, caminar sobre raquetas de nieve o lanzarse por la pista de trineo que se extiende entre Courchevel 1850 y Courchevel 1550, también después del atardecer, ya que esta pista está iluminada hasta las 19:30 horas.
Los tres distritos de Courchevel se caracterizan por su arquitectura conformada por edificios de apartamentos y chalets, en los que predomina el empleo de madera natural y un estilo arquitectónico auténticamente genuino y típico de la región. En Courchevel 1850 se encuentran también numerosos hoteles de lujo que, en su mayoría, tienen acceso directo a las pistas.
A propósito: Courchevel ofrece también la posibilidad única de desplazarse en avión a las vacaciones de esquí, ya que su “Courchevel Altiport” está directamente conectado con el aeropuerto de Ginebra a través de tres vuelos diarios.